Informaciones
Psiquiátricas
2020 - n.º
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espontáneamente mientras hablaban en la
sala de espera y trasladó ese hallazgo na-
turalístico a un contexto psicoterapéutico,
iniciando encuentros grupales multifamilia-
res estructurados.
En Buenos Aires, en los años sesenta, Jor-
ge García Badaracco desarrolla el concepto de
psicoanálisis multifamiliar
. El psiquiatra ar-
gentino elaboró una teoría sobre la etiología
de las psicosis y señalaba la relevancia de las
interdependencias familiares en la génesis de
los trastornos mentales graves (4). Asimismo,
a través de su abundante trabajo con grupos
multifamiliares, describió en qué consistían
algunos de los procesos de recuperación del
trastorno mental grave. Para el psicoanalista,
el grupo de terapia multifamiliar “es a la vez
un dispositivo de trabajo terapéutico y un
laboratorio social, en el que se puede desple-
gar una forma de trabajar los conflictos de la
familia y los conflictos sociales, que respeta
la complejidad de lo real” (5). En otra de sus
obras García Badaracco escribe cómo inició la
terapia multifamiliar (6):
«Mi primera actividad como psiquiatra y
psicoanalista empezó con la psicoterapia
bipersonal. Ya entonces empecé a obser-
var las dificultades que presentaban los
pacientes difíciles, a los que resultaban
estériles nuestros intentos para conse-
guir cambios que abrieran un camino
para seguir avanzando. Las mismas difi-
cultades se me presentaban en el ámbito
hospitalario, con pacientes crónicos, con
los que incluso era difícil intentar el más
mínimo diálogo. Para ser operante, algo
había que cambiar. Al comprender que
la sesión terapéutica era vivida como un
sometimiento y una imposición, hice un
giro de ciento ochenta grados y traté de
crear una relación más libre y espontá-
nea. Por invitación mía, se fueron incor-
porando al grupo: familias, terapeutas y
personal auxiliar. Este fue el germen de
la Comunidad Terapéutica Psicoanalítica
de Estructura Multifamiliar».
En los años setenta, el psiquiatra británico
Eia Asen lidera un modelo multifamiliar que
implementa en el Malborough Family Service
de Londres, un Hospital de Día para jóvenes
procedentes de contextos familiares deses-
tructurados con riesgo de exclusión social
(7). Asen y sus colaboradores desarrollaron
un medio terapéutico intensivo dónde par-
ticipaban las familias durante ocho horas,
cinco días a la semana, basado en la terapia
familiar sistémica estructural de Salvador Mi-
nuchin y la Escuela de Milán.
En España, durante los años ochenta y no-
venta, Sempere y Fuenzalida crean la Terapia
Interfamiliar (TIF) (8). Psiquiatra y psicólo-
go, articulan un modelo de terapia grupal de
carácter clínico-social. Con la influencia de
las aportaciones de García Badaracco, se nu-
tren de los fundamentos de las escuelas de
terapia familiar sistémica y las aportaciones
centradas en el vínculo. Trabajan con una
conducción terapéutica del GMF basada en
el establecimiento de una relación horizon-
tal con una actitud abierta y democrática,
cuya principal ventaja es su accesibilidad a
los grandes grupos, y en general, a la co-
munidad.
En los Estados Unidos, también en la dé-
cada de los noventa, William R. McFarlane
incorpora el modelo multifamiliar con un
enfoque psicoeducativo
en programas de de-
tección e intervención temprana en primeros
episodios psicóticos. El psiquiatra americano
incorpora los GMF en el tratamiento de la
psicosis incipiente. En su enfoque integra
elementos de las teorías cognitivas-conduc-
tuales que combina con la teoría sobre la
Emoción Expresada de Vaughn y Leff (9). En
PSICOTERAPIA MULTIFAMILIAR EN LA PSICOSIS INCIPIENTE:
UN ENFOQUE INTERDISCIPLINAR Y COMUNITARIO