Informaciones
Psiquiátricas
2019 - n.º
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fases ulteriores del sueño para volver a un
máximo al despertar. El ritmo circadiano de
secreción del cortisol puede modificarse por
diversos factores, entre los que se encuentra
la exposición al estrés.
Para evaluar la función del eje HHA se
utilizan determinaciones basales de cortisol
e índices dinámicos. Entre estos últimos se
incluyen la RCD, la PCD y la supresión del
cortisol en el test de supresión con dexame-
tasona, que informa sobre la retroalimenta-
ción negativa del eje HHA.
Eje HHA e hipocampo
El cortisol atraviesa la barrera hematoen-
cefálica y se une a receptores de glucocor-
ticoides (RG) en regiones cerebrales especí-
ficas. Dichas regiones cerebrales incluyen el
hipocampo y el córtex prefrontal (CPF), que
también participan en la regulación del eje
HHA mediante mecanismos de retroalimenta-
ción negativa (5,6). Además, el hipocampo y
el CPF están implicados en diversos aspectos
del rendimiento cognitivo, fundamentalmen-
te en procesos de memoria verbal y visual,
y memoria de trabajo y función ejecutiva,
respectivamente (7,8).
A través de la activación del RG, el cortisol
regula la supervivencia y excitabilidad de las
neuronas del hipocampo, la neurogénesis y
la adquisición de la memoria (6). El estrés
crónico, que genera un aumento persistente
de los niveles de GC, induciría alteraciones
en estas funciones y conduciría a diferen-
tes grados de atrofia del hipocampo, contri-
buyendo a la alteración de los procesos de
aprendizaje y memoria dependientes de esta
estructura cerebral (9).
Eje HHA e hipocampo en
modelos animales de
roedores ancianos
Estudios en roedores viejos muestran que
los niveles basales de corticosterona en
plasma correlacionan con el grado de de-
generación del hipocampo y con déficits de
memoria espacial (10,11). Estas alteracio-
nes se atenúan con una adrenalectomía a la
mitad de la vida y la administración de GC
sustitutivos a dosis bajas (11). De esta ma-
nera, niveles elevados de GC contribuirían de
forma directa a las alteraciones estructurales
y funcionales del hipocampo (12) y explica-
rían, en parte, la variabilidad interindividual
de dichas alteraciones en relación con la
edad en roedores (9).
Eje HHA e hipocampo
en el anciano
La relación entre los niveles de GC y el vo-
lumen y la función del hipocampo es similar
en humanos. En el síndrome de Cushing, que
genera una situación de hipercortisolismo, el
volumen del hipocampo correlaciona negati-
vamente con la concentración plasmática de
cortisol y positivamente con las puntuacio-
nes en los test de memoria verbal (13). De
nuevo, dichas alteraciones cognitivas y del
volumen del hipocampo mejoran tras el tra-
tamiento y la normalización de los niveles
de cortisol (13). Llegados a este punto, cabe
preguntarse si esta relación se extiende a los
ancianos sanos.
Numerosos estudios relacionan el enve-
jecimiento con un aumento de los niveles
basales de cortisol y con una concentración
de cortisol al anochecer más elevada, lo que
aplana la pendiente de secreción diurna. Sin
embargo, se han descrito variaciones consi-
ACTIVIDAD DEL EJE HIPOTALÁMICO-HIPOFISARIO-ADRENAL Y RENDIMIENTO COGNITIVO
EN EL ANCIANO. EL PAPEL DEL ESTADO DE REMISIÓN DE LA DEPRESIÓN MAYOR