Informaciones
Psiquiátricas
2019 - n.º
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antidepresivo puede ser eficaz, pero no lo
son menos otras acciones cómo la práctica
de ejercicio físico (Brenes et al. 2007).
Las últimas actualizaciones sobre el trata-
miento de la depresión menor y la depresión
subsindrómica de las personas mayores reco-
miendan, por este orden de actuación (Ly-
ness, 2018):
1º)
Conducta expectante (
watchful waiting
),
puesto que entre el 6 y el 22% remiten
espontáneamente
2º)
Psicoterapia cognitivo-conductual
3º)
Otro tipo de psicoterapia: interpersonal,
de reminiscencia, de resolución de pro-
blemas
4º)
Para los pacientes refractarios a los pa-
sos anteriores: pautar tratamiento anti-
depresivo
¿Estados postdepresivos?
La cuestión fundamental a plantear sería si
la propia depresión mayor supone en los pa-
cientes geriátricos una merma o una conse-
cuencia que diera lugar a cuadros menores o
subsindrómicos que tendieran a la cronicidad.
En ese caso se podrían aplicar las teorías
que sugieren que, en la depresión geriátrica,
existen mecanismos vasculares e inflamato-
rios que favorecerían la desconexión de al-
gunas áreas subcorticales generando algunos
síntomas afectivos menores, apatía, enlen-
tecimiento, disfunción ejecutiva, tal y cómo
también ocurre en las depresiones vasculares
(Taylor et al. 2013).
Por esos o por otros mecanismos se ha
comprobado también cómo la propia de-
presión, especialmente si el tratamiento se
aplica demasiado tarde, favorece la pérdida
de volumen del hipocampo y esto también
podría asociarse con los síntomas cognitivos
residuales (Sheline et al. 2003).
Realmente existen datos neurobiológicos
asociados a la depresión de aparición tar-
día que podrían sugerir que existen daños
vasculares e inflamatorios, traducidos tam-
bién en neuroimagen y en la clínica afectiva
y neuropsicológica (Disabato et al., 2012),
que pudieran suponer un proceso crónico re-
sidual favorecedor de los estados postdepre-
sivos en los pacientes mayores.
Conclusiones
Pueden existir síntomas residuales has-
ta en el 80% de las personas mayores que
sufren una depresión, incluso cuándo se
considera que ésta ha remitido. Entre estos
síntomas destacan los problemas de con-
centración, el enlentecimiento, los sínto-
mas afectivos menores o los trastornos del
sueño.
En el continuo entre “No depresión” y
“Depresión Mayor” la depresión subsindró-
mica podría considerarse cómo un estado
intermedio.
Otros autores sugieren que la depresión
subsindrómica podría también suponer una
nueva categoría dentro de los trastornos
afectivos, denominada con mayor precisión
depresión sintomática subsindrómica
; y es-
taría emparentada con la depresión menor,
la depresión leve, la depresión subumbral y
la depresión sin tristeza.
En cualquier caso estos estados postde-
presivos y subdepresivos pueden suponer
una importante repercusión funcional, so-
cial y de calidad de vida en las personas
mayores. Por ello se recomienda una “vi-
gilancia estrecha”, utilizando psicoterapia
cognitivo-conductual y de otros perfiles,
así cómo otras actividades cómo el ejerci-
cio físico, antes de recurrir al tratamiento
psicofarmacológico si fuese necesario.
ESTADOS POSTDEPRESIVOS: RELEVANCIA CLÍNICA DE LA DEPRESIÓN
SUBSINDRÓMICA EN LOS MAYORES