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Informaciones
Psiquiátricas
2018 - n.º
234
Abstract
Aggressiveness offers a creative potential
of transformation to the group. The impor-
tance of attending to the darkest, disruptive
parts of the human beings, promotes insight
and integration of new points of view. We
will not just consider the areas in which the
group psychotherapy helps the individual,
but also the difficulties that being in a group
of these characteristics generates. Taking as
a guide the concept of anti-group revisited
by Nitsun in 2015, and the contributions of
both Bion and Foulkes explaining the group
phenomena, we describe the destructive pro-
cesses that take place, threaten and promote
the functioning of the psychotherapy groups
for patients with a drug addiction problem.
Beyond the processes related to the task,
such manifestations of aggressiveness can
derive from the therapists’ attitude to the
work, which is key in creating a supportive
environment of individual and group trans-
formation.
Key Words:
Aggressiveness. Anti-group.
Container. Contained. Transformation.
Introducción
Es una vieja historia, pero nunca pasa de
moda. Aquella en la que el fundador del gru-
poanálisis, S.H. Foulkes, se decide a comprar
unas cortinas para su despacho, y para ello
se dirige a una de las tiendas más prestigio-
sas (y caras) de Londres, pero se le olvidan
las gafas. De todos modos, ha ido a com-
prar cortinas, y así lo hará. Escoge una tela
repleta de colores, con motivos persas, de
los que no acaba de ver los detalles al no
tener las gafas, pero cuya tonalidad le agra-
da. Unas semanas más tarde, al recibir las
cortinas listas para colgarlas, ve que éstas
reproducen una escena bélica, con soldados
persas capturados y degollados. La sorpresa
es mayúscula al darse cuenta.
Esta anécdota se sigue utilizando para
mostrar la tendencia de algunos terapeutas
de grupo a mirar por encima, o no ver, los
aspectos más oscuros y disruptivos del gru-
po. La “ceguera” de Foulkes puede indicar
una visión idealizada y excesivamente opti-
mista del trabajo grupal, y la necesidad de
enfocar nuestra visión hacia algo que está
ahí, si lo queremos ver, claro está.
Así que seguimos con experiencias. Por-
que siempre hemos pensado que uno escribe
desde la experiencia, y en este caso no iba
a ser menos. Nos enfrentábamos a la idea
de escribir sobre las manifestaciones de la
agresividad en el seno de la terapia de grupo
para pacientes con trastornos por consumo
de sustancias justo cuando parecía que el
grupo de terapia para la deshabituación de
cocaína se desintegraba, y cuando estába-
mos en un periodo de cambio en el equipo
(grupo) multidisciplinar, con la marcha de
una figura líder dentro del equipo y la lle-
gada de un nuevo profesional. Ha coincidido
así. Euforia, temor, ilusión, enfado, todo se
mezclaba. Y es ahí donde, de repente, todo
Alfredo Felices de la Fuente / Laura Blanco Presas