Informaciones
Psiquiátricas
2017 - n.º 228
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Suicidio y enfermedades
crónicas/incapacitantes:
En la mayoría de los casos no constaban o
no había dichas enfermedades. Sin embargo,
en los casos que existían, sí se encontraron
diferencias significativas entre los dos gru-
pos de edad, encontrando mayor proporción
de enfermedades en el grupo de edad más
avanzada. Por enfermedades crónicas/inca-
pacitantes se incluyeron dolor, enfermedad
física grave, déficit sensorial severo o varios
en conjunto. Consideramos que la incapaci-
dad producida por la pérdida de salud (bien
por sí mismas o como generadoras de pro-
cesos depresivos) justificarían estos resul-
tados. Estos datos concuerdan con fuentes
bibliográficas, en las que se describe que las
enfermedades físicas juegan un papel signi-
ficativo, afectando a un promedio de 55% de
suicidios en la etapa final de la vida
11,25,34
y
además aumenta con la comorbilidad y con
la polimedicación
24
. La enfermedad y el con-
secuente declive funcional fueron de un sig-
nificado crucial para la experiencia de vida
de los mayores
35
, son comunes en la vejez y
pueden conducir a la pérdida de autonomía,
aislamiento, dolor, mayor dependencia a ni-
vel social y desarrollo de una depresión
36
. Sin
embargo, en un estudio caso-control sugie-
ren que no difieren los casos de los controles
en el número de enfermedades crónicas y que
los mayores que murieron por suicidio tenían
mayor riesgo de enfermedad psiquátrica,
principalmente depresión
37
.
Suicidio y antecedentes familiares:
En el 95.73% no hubo o no constaban an-
tecedentes familiares, en ambos grupos de
edad. Según Mann
8
, aunque se desconocen
los genes específicos relacionados con el sui-
cidio, hay una mayor tasa de comportamien-
to suicida familiar y que es independiente de
la presencia de enfermedad mental.
Autopsia psicológica:
Se realizó AP en 24 de los 117 casos y
se ha utilizado los resultados de los datos
de la recogida de un estudio previo. A pe-
sar de que en este estudio se trata de una
pequeña muestra, el interés del estudio
sobre AP reside no tanto en el rigor meto-
dológico sino en dar otro enfoque sobre el
suicidio, teniendo en cuenta características
de la persona a través de la percepción de
sus allegados. La mayoría de los casos pre-
sentaban síntomas de mal funcionamiento
afectivo en ambos grupos de edad y más de
la mitad presentaban miedos y/o persona-
lidad preocupada, así como tristeza y des-
ánimo, que era ligeramente más frecuente
en el grupo de mayores. No destacaron en
ninguno de los grupos rasgos como teatrali-
dad, seducción o manipulación, ni tampoco
nerviosismo/agresividad ni impulsividad.
Fueron más frecuentes en el grupo de me-
nores los celos, la envidia y desconfianza,
así como el retraimiento y/o actitud distan-
te. Fue menor la necesidad de cuidados y/o
toma de decisiones en los mayores de 65
años, siendo el grupo de edad más avanza-
da; sin embargo, el deseo de morir estuvo
presente en la mitad de los casos de dicho
grupo. Tomaron precauciones para no ser so-
corridos alrededor de tres cuartas partes, y
sólo dejaron carta de despedida un 29% del
total, siendo mayor esta proporción en el
grupo de menores 3:1. En la AP se obtuvie-
ron resultados estadísticamente significati-
vos en antecedentes familiares de suicidio
y en tentativas autolíticas previas siendo
lo más probable que sean falsos positivos,
al no tratarse de un muestreo sistemático.
Según la bibliografía que describe las AP,
cada vez se está dando más importancia a
factores psicológicos (aislamiento, desave-
nencias familiares) y a varios mecanismos
cognitivos relacionados con el comporta-
ESTUDIO EPIDEMIOLÓGICO DESCRIPTIVO DE LOS SUICIDIOS CONSUMADOS EN EL ÁREA
SANITARIA DE FERROL (2010-2014): COMPARACIÓN ENTRE DOS GRUPOS DE EDAD