Informaciones
Psiquiátricas
2020 - n.º
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mentado con anterioridad se puede criticar
que esta aproximación sólo identifica un
30% de personas en riesgo de desarrollar
una psicosis, recientemente se están plan-
teando el uso de calculadoras que combi-
nan una serie de variables clínicas (edad,
síntomas psicóticos, habilidades cognitivas,
situaciones estresantes y traumáticas, ante-
cedentes familiares de psicosis)para inten-
tar definir el riesgo de psicosis en población
EMAR (18,19). Aunque estas calculadoras se
han utilizado en Estados Unidos en el campo
de investigación y su uso en la práctica clí-
nica no se ha extendido, especialmente en
nuestra región, resultan un aspecto de in-
terés para poder cribar EMARs de diferentes
riesgos y poder decidir en el futuro inter-
venciones más o menos intensivas y segui-
mientos más o menos largos. En reuniones
del equipo TEIP3 hemos planteado la posi-
bilidad de añadir otras variables para tomar
decisiones con pacientes EMARs, y aunque
no utilizamos directamente una calculadora,
sí que tenemos en cuenta variables que se
han añadido a estas calculadoras como el
rendimiento cognitivo (dominios de veloci-
dad de procesamiento y memoria verbal), la
historia familiar de psicosis, o los antece-
dentes de eventos estresantes e historia de
trauma infantil. En mi opinión los pacientes
EMAR que presenten alteraciones en estos
dominios, así como en la funcionalidad,
serían tributarios de una atención más in-
tensiva en Programas PAE-TPIs y no tanto
los EMAR de menor riesgo (buen rendimien-
to cognitivo, ausencia de historia familiar
de psicosis o de antecedentes estresantes
traumáticos), en los que podría hacerse una
valoración y seguimiento durante un tiempo
menor en Programas específicos y derivarse
a atención estándar.
Investigación y evaluación
de intervenciones
El disponer de un equipo PAE-TPI ofrece la
posibilidad de desarrollar líneas de investi-
gación, así como plantear la evaluación de
intervenciones estructuradas en población
EMAR o PEP para decidir si resulta de in-
terés mantenerlas en el tiempo o conviene
adaptar nuevas terapias. Nuestro equipo ha
estudiado el papel de los grupos psicoedu-
cativos y de entrenamiento metacognitivo
en pacientes con un PEP. En una publica-
ción reciente de nuestro equipo junto con el
equipo PAE-TPI de Reus, se demuestra que
la participación en estos grupos mejoran los
síntomas depresivos y los sesgos cognitivos
de pacientes con un PEP (20). En dicho es-
tudio nos planteamos si el orden de los gru-
pos (comenzar por psicoeducación o entre-
namiento metacognitivo) lograba cambios
diferentes (o específicos) en determinados
síntomas, y el resultado fue que no impor-
taba. Por ejemplo, tanto la psicoeducación
como el entrenamiento metacognitivo mejo-
raron los sesgos cognitivos en los pacientes
que participaron en estos grupos, y se con-
siguió también una reducción de síntomas
depresivos. Actualmente realizamos los gru-
pos en dos tandas, siendo la primera tanda
de 8 semanas para el grupo de psicoeduca-
ción (que incluye habilidades sociales), y en
una segunda tanda de 8 semanas el grupo de
entrenamiento metacognitivo.
También estamos realizando un ensayo
clínico, actualmente en curso, sobre la efec-
tividad de un programa de rehabilitación
cognitiva con el Neuropersonal Trainer. Re-
sulta importante realizar estas evaluaciones
porque permite decidir si se mantienen de-
terminadas intervenciones en la cartera de
servicios o conviene modificarlas. En nues-
EQUIPO DE INTERVENCIÓN PRECOZ EN LA PREVENCIÓN DE PSICOSIS DEL PARC TAULÍ (TEIP 3): UNA VISIÓN
PERSONAL DE LAS DIFICULTADES, ESTADO ACTUAL Y RETOS FUTUROS SOBRE LA IMPLEMENTACIÓN DE UN
PROGRAMA DIRIGIDO A LA ATENCIÓN DE TRASTORNOS PSICÓTICOS INCIPIENTES