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Informaciones
Psiquiátricas
2020 - n.º
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la irritabilidad y el aislamiento social; 4) se
omitieron la disminución del interés (no del
placer) y de la concentración (7).
En verdad, se puede especular que la de-
presión en la demencia probablemente difie-
re de la depresión en personas sin demencia
en términos biopsicosociales. Además, no
hay una entidad homogénea ‘depresión en
la demencia’. Existen diferentes formas de
depresión en diferentes personas, con di-
ferentes formas de demencia, y diferentes
puntos en el tiempo a lo largo del proceso
de evolución.
Livingston et al. intentaron sistematizar
el problema distinguiendo tres situaciones:
1) la depresión ‘reactiva’ a las perdidas; 2)
un grupo ‘homofenotípico’ en el que el sín-
drome parece depresión, pero puede diferir
biológicamente y estar relacionado con la
neurodegeneración; 3) una recaída de tras-
torno depresivo
major
o un primer episodio
surgiendo después del diagnóstico de de-
mencia (9). Así, como siempre en Psiquia-
tría, debemos considerar diferentes factores
etiológicos (desde los más ‘orgánicos’ o bio-
lógicos hasta los más reactivos o psicoso-
ciales). Hay que revisitar Dilthey o Jaspers,
y la distinción entre ‘explicar’ (por ejemplo,
la etiología biológica) y ‘comprender’ (por
ejemplo, cómo uno reacciona al confrontarse
con los desafíos de la demencia) (7). Todo
esto implica adoptar estratégicamente un
enfoque psicopatológico complementar más
‘explicativo’ o más ‘comprensivo’, según las
circunstancias.
Relaciones Depresión-Demencia
En conclusión, las complejas relaciones
entre depresión y demencia no son en abso-
luto un tema simple (7,9). Algunos puntos
importantes están sumariados en la figura 1.
Por un lado, la depresión es a menudo
una consecuencia de la demencia (ya sea
que se originó como una reacción psico-
lógica a las pérdidas de demencia - depre-
sión 'reactiva' - o como una expresión del
proceso orgánico en sí mismo - depresión
'orgánica cerebral'). Por otro lado, la mayo-
ría de los hallazgos sugieren un mayor ries-
go de desarrollar demencia en individuos
con depresión, aunque la diferencia en el
riesgo de depresión de inicio tardío ver-
sus de inicio temprano aún está en debate
(11). Además, los médicos experimentados
están acostumbrados a presenciar una de-
presión duradera y resistente que no raro
se convierte en demencia. Esto sería una
manifestación de depresión como un pró-
dromo de demencia. Finalmente, indepen-
dientemente del debate en curso sobre la
existencia y dirección de cualquier forma
de causalidad, la depresión y la demencia a
menudo coinciden clínicamente.
Figura 1. Relaciones importantes entre
Depresión y Demencia.
¿La depresión 'reactiva'?
¿La depresión 'orgánica cerebral'
(homophenotypic group)
?
¿La depresión como factor de riesgo de
demencia?
¿La depresión como 'pródromo' de
demencia?
¿Coincidencia (depresión y demencia)?
Manuel Gonçalves-Pereira