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Informaciones
Psiquiátricas
2018 - n.º
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raciones en la velocidad de procesamiento,
siendo las más graves las de las personas con
esquizofrenia con un tamaño del efecto alto
(ver Tabla 1). Concretamente las personas
con esquizofrenia mostraron un peor desem-
peño en tareas como Clave de números, en la
parte A del Trail Making Test y en la condi-
ción de denominación de colores del Test de
Stroop, mostrando un tamaño del efecto alto
(Schaefer et al., 2013). Igualmente las per-
sonas con trastorno bipolar, trastorno depre-
sivo mayor y trastorno obsesivo compulsivo
fueron significativamente más lentas en el
desempeño de estas pruebas en comparación
con la población no diagnosticada aunque su
rendimiento no se mostró tan alterado como
en las personas con esquizofrenia, mostran-
do un tamaño del efecto moderado (ver Figu-
ra 1; Bora, 2013; Mann-Wrobel et al., 2011;
Shin et al., 2014).
Cognición social
Las personas con esquizofrenia, trastor-
no bipolar y trastorno obsesivo compulsivo
presentaron déficit específicos en cognición
social aunque la diferencia de la gravedad en
estos déficits entre los diagnósticos fue ma-
yor que en los procesos cognitivos revisados
con anterioridad. Concretamente los déficits
en la cognición social fueron mayores y más
generalizados en las personas con esquizo-
frenia (ver Tabla 1).
En primer lugar los resultados de la re-
visión mostraron que los tres diagnósticos
compartieron alteraciones en la percepción
de emociones. Sin embargo mientras en las
personas con esquizofrenia las dificultades
en la percepción de emociones fueron gra-
ves, mostrando un tamaño del efecto alto,
en el resto de diagnósticos se observaron
dificultades leves con un tamaño del efec-
to bajo en dicho componente de la cogni-
ción social (Ver Tabla 1). Concretamente
las personas con esquizofrenia mostraron
dificultades importantes en la percepción
de emociones faciales así como en la iden-
tificación y discriminación de las diferentes
emociones en comparación con controles no
diagnosticados mostrando un tamaño del
efecto alto (Chan et al., 2010; Savla et al.,
2013). Las dificultades en el procesamien-
to de emociones también se observaron en
la percepción de la prosodia emocional, es
decir el tono emocional de la voz, aspecto
fundamental en la identificación de las emo-
ciones y las intenciones de los demás, que
contribuye a nuestra comprensión de lo que
se conoce como el significado pragmático
del discurso. La percepción de la prosodia
emocional estaría alterada en las personas
con esquizofrenia, con un tamaño del efecto
alto, encontrándose esta alteración en esta-
dos tempranos del trastorno (Hoekert et al.,
2007). Las personas con trastorno bipolar
también presentaron alteraciones en el re-
conocimiento de emociones en comparación
con los controles no diagnosticados, aunque
estas alteraciones fueron sustancialmente
más leves que en las personas con esquizo-
frenia, mostrando un tamaño del efecto bajo
(Samame et al., 2012). Las personas con
trastorno obsesivo compulsivo mostraron al-
teraciones leves o un tamaño del efecto bajo
en comparación con los controles tanto en la
percepción, identificación y discriminación
de expresión emocionales faciales como la
prosodia emocional (Plana et al., 2014).
En segundo lugar los resultados de la re-
visión mostraron que mientras las personas
con esquizofrenia y con trastorno bipolar
presentaron alteraciones importantes en la
teoría de la mente, con un tamaño del efec-
to moderado-alto, dichas alteraciones fueron
leves en las personas con trastorno obsesi-
vo-compulsivo (Samame et al., 2012; Savla
Olimpia Díaz-Mandado