Informaciones
Psiquiátricas
2017 - n.º
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cuidado personal, responsabilidades labo-
rales, manejo del dinero, ocio y organiza-
ción de las tareas escolares y del trabajo.
Aunque no se fija para el diagnóstico un
requisito específico de edad, los síntomas
del individuo deben comenzar durante de
periodo del desarrollo y su diagnóstico se
basa en la gravedad de los déficits del fun-
cionamiento adaptativo. Este trastorno se
considera crónico y coexiste, a menudo, con
otros trastornos mentales tales como de-
presión, trastorno por déficit de atención e
hiperactividad y trastornos del espectro au-
tista. Tampoco se establecen niveles de Co-
eficiente Intelectual (CI), o prueba similar
para su diagnóstico, aunque suele conside-
rarse que existe DI en personas con dos des-
viaciones estándar menos que la media de la
población, lo que equivale a una puntuación
de CI de 70 o menos. Se consideran cuatro
grados de afectación: leve, moderada, grave
y profunda
3
.
La atención en DI se fundamenta en los
conceptos, prácticas, y herramientas que
se han desarrollado en las últimas tres dé-
cadas. En este periodo se han desarrollado
tres importantes avances científicos y so-
ciológicos que han influido en la práctica
profesional en el campo de la discapacidad
intelectual
4
:
1.
La importancia de centrarse en la calidad
de vida de la persona.
2.
Un concepto ecológico de la discapacidad.
3.
El diseño y la aplicación de apoyos y fa-
cilitadores para mejorar la discapacidad,
el funcionamiento y la calidad de vida de
la persona.
Calidad de vida
El concepto de calidad de vida que se pro-
pone es el de Schalock y Verdugo en 2002
5
:
“Calidad de vida es un estado deseado de
bienestar personal que: a) es multidimen-
sional, b) tiene propiedades éticas, univer-
sales, ligadas a la cultura; c) tiene com-
ponentes objetivos y subjetivos; d) está
influenciada por factores personales y am-
bientales”.
Estos autores proponen ocho dimensio-
nes de la calidad de vida. La tabla siguiente
(Tabla 1) correlaciona las dimensiones de la
calidad de vida con diversos indicadores de
su logro (tomada de Schalock, 2009
6
):
Esta concepción, por tanto, refleja tanto
los deseos personales subjetivos como las
condiciones objetivas de la vida de la perso-
na. Es decir, supone un nexo entre los valo-
res generales de la sociedad, expresados en
derechos: equidad, autonomía, no discrimi-
nación, participación e inclusión en la so-
ciedad (tal como lo refleja la Convención de
las Naciones Unidas sobre los Derechos de
las Personas con Discapacidad de 2006 y la
legislación española
7
) y la vida personal del
individuo. Por lo tanto, supone el vehículo
a través del cual se asume y mejora la equi-
dad, el empoderamiento y la satisfacción
con su propia vida
4
. Asimismo, proporciona
un marco adecuado para poder formular es-
trategias definidas y apoyos individualiza-
dos para cada una de las dimensiones antes
señaladas
8
.
El modelo de salud centrado en la persona
con DI (trastornos del desarrollo intelec-
tual) recientemente formulado complementa
el concepto de calidad de vida antes seña-
lado, haciendo referencia a la aplicación de
una concepción bio-psico-social-espiritual
en el cuidado de las personas con DI que
combina ciencia y humanismo
9
.
LA ATENCIÓN A PERSONAS CON DISCAPACIDAD INTELECTUAL: UN MODELO MULTIDIMENSIONAL
INTEGRAL BASADO EN LA CALIDAD DE VIDA, RELACIONES CON EL ENTORNO Y APOYOS