Informaciones
Psiquiátricas
2016 - n.º 226
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o directamente como forma sólida en pol-
vo. Son productos con aspecto de plantas
trituradas en ocasiones con similitudes de
color y textura con el cannabis. Se venden
bajo la marca Spice u otros nombres como
K2, moon rocks, Yucatan fire, skunk, spice
silver, gold, diamond, gorillaz, tropical si-
nergy, Egypt, K2, solar ÿear, earth impact,
lotus bleue y otros. Desde el principio se
comercializan en internet o tiendas especia-
lizadas, las “smart shops”. Allí se exhiben
sobres de colores llamativos con una mezcla
de hierbas exóticas y extractos de plantas
aromáticas a las que se añaden los análogos
del cannabis. Como señuelo publicitario se
pretende contextualizar en la aromaterapia,
ambientadores para yoga, sesiones de medi-
tación y lo que la imaginación dé de sí. Y
(casi) siempre con la advertencia: “no apto
para el uso humano”.En los últimos años, un
creciente número de tiendas y comercios en
línea ofrecen cannabinoides sintéticos como
“sustancias químicas para la investigación”
en cantidades que varían desde miligramos
hasta kilogramos. Algunas de esas sustan-
cias son de gran pureza, mientras que otras
están contaminadas con subproductos o son
otras sustancias.
Inicialmente, el cannabinoide sintético
más difundido fue el JWH-018. En 2010 fue
prohibido en algunos países e inmediata-
mente reemplazado por otro componente
similar, el JWH-073. Aunque hay diferencias
entre los diversos cannabinoides sintéticos,
suelen ser más potentes que el THC de la
planta Cannabis Sativa.
Para los cannabinoides sintéticos las vías
de consumo son la fumada, la inhalada y con
menos frecuencia la bebida como infusión.
Pueden fumarse solos o junto a tabaco como
se hace con el cannabis, en forma de cigarri-
llos o fumándolos en una pipa.
Efectos de los cannabinoides
sintéticos
Dependiendo del preparado y la dosis, los
efectos pueden ser similares a los del can-
nabis, apareciendo cierta euforia, conges-
tión conjuntival, taquicardia, sequedad de
boca y alteraciones del estado anímico y de
la percepción. La duración del efecto es de
4 a 6 horas. En los casos de intoxicación
puede aparecer agitación, confusión mental
y oscilaciones del nivel de conciencia. Me-
nos frecuentes son la aparición de sedación,
ansiedad, agitación, irritabilidad, deterioro
de la memoria y sintomatología psicótica.
En este sentido se han notificado casos de
inicio, exacerbación y empeoramiento de
psicosis. Los efectos psiquiátricos son mu-
cho más frecuentes y graves. A diferencia
del cannabis, con los cannabinoides sintéti-
cos pueden aparecer convulsiones y estado
epiléptico.
Además de estos efectos neuropsiquiátri-
cos se ha informado sobre síntomas cardio-
vasculares como taquicardia, hipertensión,
bradicardia o dolor torácico, y de efectos
gastrointestinales como náuseas y vómitos,
además de otros efectos tales como midria-
sis y aumento o disminución del apetito. Se
han descrito casos de angina, infarto agudo
de miocardio, arritmias y daño renal. A dife-
rencia del cannabis, los canabinoides sinté-
ticos pueden producir una intoxicación más
grave e incluso mortal, habiéndose descritos
muchos casos letales. Además de los riesgos
referidos, hay sospechas fundadas de que
algunos de estos productos, y en concreto
sus metabolitos, podrían ser potencialmente
cancerígenos.
Desafortunadamente los cannabinoides
sintéticos no se detectan con los test rápi-
dos de drogas en orina para el cannabis, así
que la intoxicación deberá sospecharse por
CANNABINOIDES SINTÉTICOS
